Éxito de público en el 55 Rally Barcelona-Sitges

55 ediciones del Rally de coches de época Barcelona-Sitges. A pesar de que el número de participantes disminuye, los organizadores intentan encontrar sponsors para mantenerlo bien vivo.

Salió el sol y todos los vehículos iban llegando a la Plaza Sant Jaume, para desayunar la típica chocolatada, se paseaban con sus indumentarias, felices y orgullosas. A la hora prevista, el Alcalde de Barcelona, Xavier Trias, junto al alcalde de Sitges, Miquel Forns, dieron la salida.

Durante todo el recorrido la gente se agolpaba para contemplar las bellezas que circulaban por las calles principales de las poblaciones. Además, los dos alcaldes subieron en la “Genoveva”, como ya es tradición, un Renault de 1914 propiedad del Ayuntamiento de Barcelona  que, cumplió 35 ediciones  participando de forma ininterrumpida en esta mítica prueba.

Las costas del Garraf  se las vio como hace un siglo atrás, cuando ir en coche era un placer, un recreo y también  un lujo, la cincuentena de coches de época fabricados entre 1905 y 1928, que este año han participado en el Rally Barcelona-Sitges han recorrido sin problemas, los pocos más de 40 km que separan las dos poblaciones.

Diez de estos vehículos superan un siglo de vida, y entre todos destacaba un Temperino de 1913, llegado de Italia y que se estrenaba en la clásica y un Darraq de 1905 que abrió el Rally.

La primera parada fue en el puerto de Aiguadolç , allí muchos fans de esta cursa fueron a recibirlos y pudieron  acercase,  tocar y fotografiarse delante de unas maquinas valoradas sobre todo por su aspecto estético y,  no tanto por la velocidad, todo y que hay algunos que corren mucho. Ford, Rolls Royce, Hispano Suiza, Cadillac, Jaguar, y muchos otros, todos con una gran de historia.

La espectacularidad de los coches hace de esta caravana un hecho único que sorprende a los que participan por primera vez, la actriz Mónica Glaenzel, comentó: “El momento de las costas del Garraf, hicimos como carreras y nos íbamos adelantando,  ha sido súper divertido. Tiene un punto intrépido, no es solo ir paseando, ha sido una experiencia muy chula”.

El Temperino italiano le costó volver a arrancar, pero la insistencia de su conductor pudo conseguir  ponerlo en marcha y llegar hasta el final del trayecto, el paseo de Sitges.

El primer premio a la elegancia fue para Carla Vidal y su Packard de 1926, con el número 39; Vicenç Pérez  y su Ford A de 1927, numero 40; Anna Vidal en un Hispano Suiza de 1922, protagonista del cartel de esta edición, coche 26; Olga Torres en un Rochet Schneider de 1919, número 20 y el quinto premio recayó en el Ajuntament de Barcelona y su Renault de 1914.

El premio de la elegancia infantil recayó en Martina Álvarez de Lara, que iba en el coche número 26.

También tuvieron un reconocimiento especial  como los mejores de esta edición del rally: el Wolseley de José Orriols, de 1908, y el Reyrol de 1909, conducido por Alexis Llaveria. 

Montse Carreño, 03-Marzo-2013