Garbiñe Muguruza insuperable

La hispanovenezolana Garbiñe Muguruza conquistó el título más importante de su carrera profesional en el torneo WTA de Pekín, tras superar en la final a la suiza Timea Bacsinszky por 7-5 y 6-4 en 1h.34’, teniendo que remontar un 2-5 adverso en la primera manga. El triunfo permite a la jugadora de 22 años cumplidos ese mismo día y formada en Barcelona situarse en el nº 4 de la clasificación mundial.

“Para mí, ser capaz de venir y ganar el torneo después de perder la final en Wuhan la semana pasada es un gran logro. Es increíble”, expresaba en la pista, que se tuvo que retirar por dolores en el tobillo izquierdo en dicho torneo. Éste es el segundo título de su carrera, tras el logrado en Hobart el año pasado, pero este ha dado más importante por la categoría ya que es un Masters 1.000 de la WTA.

Esta temporada, Muguruza alcanzó su primera final de Grand Slam en Wimbledon, además de quedar finalista en Wuhan, semifinalista en Dubái, cuartofinalista en Roland Garros y Tokyo, y octavofinalista en el Open de Australia.

Durante el transcurso del partido hubo muchos errores no forzados, 23 la española y 24 la suiza, muestra de los nervios y la emoción de estar en la final de un grande que tenían cada jugadora. En ganadores, superior Garbiñe 22-17. Garbiñe se controló mejor en los instantes definitivos.

La jugadora se lleva un trofeo, un talón de casi un millón de dólares, la clasificación para jugar por primera vez el Masters individual a final de temporada (el de dobles ya está clasificada junto a Carla Suárez). Este mérito no ocurría desde los tiempos de Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez desde 2001. Por lo tanto Muguruña será la primera española que irá al Masters en 14 años por eso se preparará adecuadamente para la cita de Singapur. “Ahora a pelear por el trofeo”, indicó, a sabiendas de que no estará la número uno mundial Serena Williams, lo que abre la competición al resto.

“Estoy realmente contenta de cómo he jugado este partido porque empecé muy nerviosa. Fue un inicio difícil, pero a veces eso ayuda, porque estaba convencida de que en algún momento iba a poder darle la vuelta. Vi que no era un buen día con el saque y me centré en ver cómo el saque y me centré en ver cómo podía contrarrestarlo al resto, y por suerte ha funcionado”.

Empezó la temporada Muguruza fuera del top-20 de la clasificación WTA, en la vigésima primera posición. Llegar a la final de Wimbledon, que perdió con Serena Williams, supuso el primer gran salto en su carrera ya que entró en el ‘top ten’ como novena. La semana anterior se retiró ante Venus Williams por dolor en el tobillo, pero subió al quintó lugar, que le ha durado pocos días.

“Es un paso hacia delante porque necesitaba ese punto de ambición”, subrayó la jugadora, número cuatro del mundo.

Ante la clásica pregunta de a quién dedicaba el premio, Muguruza lo tenía claro: “Siempre se los dedico a mi familia, es por ellos que he tenido la oportunidad de jugar, me han apoyado siempre y son unos fanáticos del tenis”.

Una anécdota que le hace sonreír cada vez que escucha que los chinos le apodan desde su llegada a la fama como “Mogu” (La Seta) dijo “Espero que no salga de aquí (de China), porque suena un poco feo... ¿Quizá ‘La Boletus’?”.

“Ahora espero tener unos días para descansar y apreciar lo que hemos conseguido. Aún sigo con las molestias y espero recuperarme tanto del tobillo como del cansancio que arrastro” explicó una radiante Garbiñe.

Montse Carreño, 11-Octubre-2015