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La cadena de pizzerías NAP con denominación de origen napolitano sigue creciendo

La cadena de pizzerías NAP con denominación de origen napolitano sigue creciendo

Los fundadores de NAP, empresa formada por un grupo de amigos y socios llevan 11 años con su proyecto, y ahora acaban de inaugurar dos nuevos restaurantes, uno en el madrileño barrio de Chamartín y otro en la Gran Vía de Bilbao. Su primera apertura tuvo lugar en Barcelona en el 2011, en estos momentos disponen de 11 locales repartidos  entre Madrid, San Sebastián, Bilbao y Barcelona. Por tanto, llevan 11 años en el mes de junio los cumplieron desde que abrieron el primer local, desembarcando tres en Barcelona, uno en Bilbao, uno en Donostia y seis en Madrid.

“no habrá dos sin tres”, dicen los propietarios, por eso confirman que habrá más novedades respecto a nuevas aperturas de locales durante este año en el que pondrán el broche a su consolidación como actor protagonista del sector, en el que mantiene un perfecto equilibrio entre su tirón popular y el beneplácito de grandes gurús de la crítica gastronómica.

Esta prestigiosa marca ha conseguido destacar en una jungla de ofertas pseudoitalianas  y mantiene la intención inicial de sus creadores de convertirse en activistas de la tradición y de la autenticidad de las pizzas napolitanas. 

Su filosofía consiste en cuidar cada detalle en el proceso de la pizza y su elaboración. Pero ante todo sacan pecho por haber conseguido el marchamo de calidad de la Associazione Verace Pizza Napoletana, algo así como la denominación de origen o el carnet de identidad napolitano. Sus pizzas Margherita y Marinara lo tienen y eso les llena de orgullo. 

Estos dos nuevos locales seguirán con el oficio de los pizzaioli, elaborando las mejores pizzas tradicionales al estilo ruota di carro.

Su epicentro será igualmente el horno de leña, fabricado por el artesano napolitano Stefano Ferrara, un ejemplar de 2.500 kilogramos, personalizado e importado de Quarto. Para la elaboración de sus pizzas se ciñen a los criterios de máxima calidad y todos sus ingredientes son de origen italiano. Harinas procedentes de Italia, tomate San Marzano DOP, mozzarella Fior di Latte o el Salame Napoli son algunos de los componentes de las pizzas que conforman su carta. Las pizzas mencionadas, la Margherita (AVPN approved) y la Marinara (AVPN approved) conviven junto con otras elaboraciones muy demandadas como la Cosacca, Napoli, Al Filetto, Quattro Formaggi, Diávola, entre muchas otras.

La familia NAP expresa: “Defendemos la pizza como una elaboración sencilla, informal, popular y asequible, y al mismo tiempo exquisita y confortable. Es el placer de las cosas sencillas, bien hechas. Hace once años tuvimos una idea que surgió de la búsqueda de la autenticidad, del slow life mediterráneo, de poder traer a España un pedazo de Nápoles. Así somos y esta es nuestra historia".

NAP es la idea de un napolitano y de un español, Antonello Belardo y Fernando Pérez, respectivamente. Confiesan: Nápoles, nuestra ciudad, es un lugar plagado de costumbres que se elevan a lo sagrado, en el que recibimos al forastero con efusividad y con pasión por mostrarle que è così che facciamo.

Madrid, Barcelona, San Sebastián y Bilbao son ciudades que encajan a la perfección con nosotros y con el auténtico carácter mediterráneo que compartimos. Ciudades en las que podemos elaborar cada día pizzas napolitanas con ingredientes auténticos y de primera calidad. Ciudades cosmopolitas en las que nos sentimos en casa.

Cuando algo trasciende en el tiempo, nuestra labor es conservarlo y asegurar que llega a la siguiente generación. Es una muestra de respeto por el trabajo que antes han desarrollado otros y al mismo tiempo nos llena de orgullo y nos liga a nuestra tierra.

Creemos en la repetición como método para llegar a la perfección; en la precisión. En la experiencia que se alcanza solo con el tiempo. En mantener una actitud casi espartana cada día para honrar una elaboración sencilla, pero trascendental y universal. Entendemos nuestro trabajo diario como un ritual, donde cada paso cuenta e influye en el resultado final.

Defendemos la pizza como una elaboración sencilla, informal, popular y asequible, y al mismo tiempo exquisita y confortable. Es el placer de las cosas sencillas, bien hechas.

Nuestro objetivo es ofrecer una alternativa rápida, de calidad y asequible adaptada al estilo de vida urbano siguiendo minuciosamente todos los requisitos que se han definido históricamente para interpretar la auténtica receta de pizza napolitana.

En NAP siempre hemos buscado la perfección a través de un oficio humilde del que nos sentimos muy orgullosos. En nuestro afán por ofrecer la auténtica pizza napolitana, cumplimos con precisión las claves de la verdadera pizza napolitana.

Desde este año, somos miembros de la Associazione Verace Pizza Napoletana, el único organismo en el mundo que certifica la auténtica pizza napolitana a través de unos controles de calidad y exactitud muy estrictos.

No podemos estar más orgullosos de ser uno de los restaurantes embajadores de este tesoro en el mundo. Es nuestra manera de homenajear nuestras raíces, no conocemos otra forma de ser pizzaioli fuera de nuestro país.

Algunas de las reglas que cumplimos para pertenecer a esta selecta lista son los 35 cm de diámetro en nuestras pizzas, las 24 h de reposo y levado de la masa y un cornicione alto y aireado.

Montse Carreño, Julio-2022