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La Sagrada Familia corona la Torre de María con la estrella

La Sagrada Familia corona la Torre de María con la estrella

Este lunes 29 de noviembre, amanecía con frío y viento. El frío era previsible, lo del viento inquietaba a los técnicos. Eran unas veinte personas con casco, que observaban tanto el cielo como la operación de enganche a la grúa de la impresionante estrella de 12 puntas. Entre ellos, los técnicos que han traído el armazón desde Francia.

Se distingue  a tres escaladores con su equipo a punto, están repasando unas instrucciones que han tenido que memorizar al milímetro. Dentro de poco, ellos fijarán la estrella a los tres puntos de apoyo de la torre, a 134 metros de altura.

Ya son las siete de la mañana. Un pequeño respiro todavía en tierra.  Las cadenas de la grúa ya sujetan bien la estrella. Mientras, los técnicos franceses salen por la calle Provenza a tomar algo caliente. Alguien más les sigue.

Curiosidad en los balcones y en las terrazas de Avenida Gaudí y Provenza. Cámaras de televisión han copado los mejores puntos de vista. No se quieren perder el espectáculo único. A las ocho menos cuarto todo está a punto.

Jordi Faulí, Arquitecto Jefe de las Obras aparece con paso decidido. Se confirma la operación, El viento ha aflojado. Se dan las condiciones… A las ocho y cuarto empieza la operación de subida, ante la emoción de los trabajadores, desde dentro del recinto, y del público, desde fuera. La grúa va elevando la estrella, sin prisa y sin pausa.

Es mágico y emocionante ver como sube la enorme estrella de cristal. El sol se une a la fiesta cuando la estrella llega a su objetivo y le regala sus primeros rayos, que se convierten en brillantes reflejos de luz blanca.  Ahora es el turno de los escaladores. La operación será larga. Hay que anclar bien. Hay que hacerlo perfecto.

La estrella pesa cinco toneladas y media. Los tres escaladores recuerdan a los astronautas cuando salen de la nave a realizar trabajos espaciales. Su concentración les impide recordar que bajo sus pies se abre un abismo de 134 metros desde el centro de la estrella, y de 138 desde la punta más alta. 

Ha pasado la mañana. La estrella ya está en su sitio. El público se alegra, los técnicos respiran aliviados. La grúa recoge a los escaladores. De momento, nos conformaremos con verla brillar con el sol. A partir del día 8, Fiesta de Virgen y día de la inauguración, difundirá todas las noches, sobre la ciudad de Barcelona, su mensaje de luz, esperanza y amor.

Sergi Valdivieso, 30-Noviembre-2021

Foto: Sergi Valdivieso.