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Un siglo de lencería francesa

Un siglo de lencería francesa

La moda interior ha ido evolucionando al mismo ritmo que la sociedad, por ello la lencería también se ha tenido que ir adaptando a los nuevos tiempos. Las cocheras y carboneras de la gaudiniana Casa Batlló, en Barcelona, expuso ‘Lingerie française’ que repasa cien años de lencería francesa, desde el siglo XIX hasta el momento actual. Un total de 140 piezas que recogen este oficio artístico y seductor que va desde los rígidos corsés, con los que no podían moverse las mujeres hasta los ligeros tejidos que actualmente se utilizan en los talleres de fabricación.

Catherine Ormen es la comisaria e historiadora de moda de esta exposición itinerante, que como era lógico se inició en París en 2011, con sólo 30 piezas, pero se ha ido agrandando con las diversas ciudades que ha visitado como Londres, Shanghai, Dubái, Berlín, Nueva York, Toronto, Moscú, Tokio y Barcelona, lugar donde estuvo de 2 al 9 de diciembre.

Participan firmas franceses de lencería/ corsetería de gran prestigio como Aubade, Barcabara, Chantelle, Empreinte, Implicite, Lise Charmel, Lou, Maison Lejaby, Passionata, Princesse, tam tam y Simone Pérèle.

La retrospectiva comienza en 1880 y finaliza con las creaciones del momento. La historia que se cuenta sigue un orden tanto cronológico como temático. El escenario, es sumamente moderno, deliberadamente minimalista y refinado, donde las 140 piezas de lencería incluidas en la exposición son mostradas de manera individual, aunque está colocada en un contexto temático, por lo que hay diferentes áreas dentro del espacio.

La presentación finaliza de manera espectacular: la magia de un hologama de tamaño natural que ofrece un striptease transhistórico. De esta forma, la ropa interior lucida por las modelos se irá transformando para representar la evolución de la silueta femenina, su lenguaje corporal y por supuesto, la lencería de cada época.

La muestra comienza en un momento en que el corsé era el rey, junto con su industria floreciente, Francia se convirtió en la primera exportadora en este sector. El corsé, un descendiente del emballenado que compensó durante siglos la ‘debilidad’ de la mujer y la ayudó a controlar sus pasiones, esculpía una silueta ideal, pero también impedía el movimiento. Si se añadía al volumen y al peso de la ropa interior y la ropa de uso externo convertía a las mujeres en objetos bellos, pero improductivos.

Para luchar contra la rigidez del corsé, en la década de 1880, los fabricantes innovaron suavizándolo con un tejido elástico. Es lo que hizo el Dr. Bernard (creador de la marca Aubade) en 1875.

A principios del XX, el corsé tropezó con la participación de las mujeres en el deporte. Por lo que en que en 1905, el corsé comenzó una transformación para ajustarse a la silueta ‘imperio’ que parecía imponerse en la moda. El corsé se desplazó entonces por debajo del busto y se alargó casi hasta la mitad del muslo. Hacia finales de la Belle Epoque, la silueta era esbelta y la ropa comenzaba a separarse del cuerpo, facilitando el movimiento. Entonces apareció el primer sujetador eran el año 1900, durante la Primera Guerra Mundial. No importaba el nombre se les decía sujetadores, sostenes o retenedores de los senos, que llevaban con un corsé más corto que servía de reductor de la cintura y mantenía las medias en sus sitio con ligas. En conclusión corsé divido en dos partes, dejando paso su nombre a sujetador, sostén, corpiño y con liguero.

A principios de los años 1920, se adoptó la forma de un cinturón con bandas elásticas que agarraban las caderas y alisaban el vientre y el trasero, es decir, la faja. Las mujeres se transformaron en “garçons”, se cortaron el pelo, las faldas se acortaban y eran los vestidos más holgados. Pero en 1930 se dio paso a una mujer escultural. La moda se convirtió en vestidos más largos y eran más conscientes del cuerpo. La faja comprimía y suavizaba el cuerpo sin llegar a ser opresiva, y se solía llevar debajo de una combinación con encaje. Los sujetadores progresaron, se separaron los senos y se intentaba respetar sus contornos naturales.

La historia real de la lencería francesa comenzó tras la Segunda Guerra Mundial. Los sujetadores eran muy variados según la marca, nacieron nuevos tejidos como el nailon, tanto blanco como de colores, un tejido que se lavaba con facilidad, se secaba rápido y no requería planchado, sustituyó rápidamente al algodón rosa o de color carne. El uso del encaje de nailon negro se extendió y con él, la imagen de algo “sexy”. Las ballenas desaparecieron y fueron sustituidas por hojas de acero, plumas de pavo y materiales de nailon o plástico.

En los sesenta, la minifalda obliga a acortar la faja y empiezan los colores y estampados. Aparecen los pantys.

En la década de los ’70 el éxito de la película “Emmanuelle” en los cines franceses en 1974, fomentó el deseo de comprar lencería más sensual. Aunque el blanco predominaba en todas las colecciones. Hacia finales de la década la lencería se convirtió en un artículo “de moda”. La lencería, a la altura de la ropa de vestir, era cada más visible y dejaría su huella en la moda a lo largo de toda la siguiente década.

En los años 1980 nacieron nuevas marcas con estilos frescos y divertidos, diseñados especialmente para mujeres muy jóvenes. La lencería ya podía elegirse en función del estado anímico y no sólo en función de la complexión: deportivo, clásico, seductor, retro, elegante… No había límites. ¡Hasta se podía llevar la ropa interior por fuera!.

La lencería se volvía suave, ligera y mimosa, sobre todo a las microfibras, eran los años 1990, empezaron a introducirse los tangas, los sujetadores con copas de relleno y el push-up.

Los colores, los tejidos y las formas de la lencería francesa van por delante de las tendencias, de forma que las mujeres disponen de las prendas que quieren cuando ellas quieren.

Montse Carreño, 02-Diciembre-2014

  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
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  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
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  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
  • 02DICIEMBRE2014 Exposición Lingerie Française en la Casa Batlló s. XIX-XXI. Foto: Montse Carreño.
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